Mateo respira y se alimenta por sus propios medios. Continuará en observación durante las próximas horas.
Mateo, el bebé de cuatro meses al que dos delincuentes expulsaron de un auto, presenta una evolución favorable y continuará en observación durante las próximas 24 horas.
El primer parte médico, que se difundió cerca del mediodía, indica que pasadas las 23 de este domingo el pequeño ingresó al Sanatorio de la Trinidad de Ramos Mejía «con diagnóstico de politraumatismo con traumatismo de cráneo y sin pérdida de conocimiento».
Mateo, continúa el documento, fue internado «en la unidad de cuidados intensivos pediátricos, donde se realizan los protocolos de diagnóstico y tratamiento».
El parte expresa que al momento presenta una «evolución favorable»: no se detectaron lesiones internas en los estudios realizados, se alimenta y respira por sus propios medios. Por último, los médicos aclararon que Mateo «continuará en observación durante las próximas 24 horas y se le dará el alta si su situación así lo amerita».
El episodio que produjo las lesiones a Mateo se inició cuando dos delincuentes abordaron a Luciana, madre del bebé, quien estacionaba su camioneta en la puerta de su domicilio, ubicado en el cruce de las calles Pringles y Conesa, Ramos Mejía, en el partido bonaerense de La Matanza.
Los ladrones interceptaron a la mujer con la intención de robarle el vehículo. Y no les importó que en el interior estuviera su hijo. «Cuando sacaron el arma, me quedé impactada», declaró la mujer. «Empecé a gritar que estaba mi bebé adentro, porque ellos en ese momento no lo sabían —contó—. Uno corrió a encender el auto y el otro se sentó al lado de Mateo».
Los delincuentes hicieron caso omiso a los pedidos de Luciana y uno de ellos le ordenó a su compañero que pusiera al auto en marcha. Con la puerta abierta, «revolearon al bebé, que se fue rodando y lo saqué de abajo de un auto», informó Luciana en diálogo con la prensa.
«Fue terrible, ellos lo único que querían era robar el auto: no les importaba nada», dijo la mujer y agregó que a su hijo «lo tiraron como si fuera una bolsa».
Infobae