El gobernador peronista de Córdoba se diferenció de los referentes del PJ, que leyeron el resultado de una elección municipal como un dato que puede proyectarse a nivel nacional.
La elección por la intendencia de Río Cuarto fue promocionada como la primera medición electoral de la gestión de Mauricio Macri, que se había involucrado en la contienda local al apoyar públicamente a Eduardo Yuni, el candidato que representaba a Cambiemos.
El resultado no fue el que el Presidente esperaba: Juan Manuel Llamosas, hombre del PJ, se convirtió en el nuevo jefe comunal tras obtener más del 46% de los votos. Y referentes nacionales del peronismo como José Luis Gioja se animaron a manifestar que el resultado de ayer “presagia lo que será la gran victoria del justicialismo en las legislativas del año que viene”.
Sin embargo, Juan Schiaretti no piensa lo mismo: el gobernador de Córdoba sorprendió al tomar distancia de sus compañeros de partido.
“No fue una derrota de Macri: en Río Cuarto, el presidente tiene una aprobación e imagen positiva superior al 50%”, aclaró el mandatario provincial en declaraciones a Radio Mitre.
“Los cordobeses distinguen bien: si es un Presidente, un gobernador o un intendente, eligen al que consideran mejor. Creer que alguien los va a hacer votar por un candidato es menospreciar la capacidad de la gente”, sentenció.
Para Schiaretti, en Río Cuarto “había una voluntad de cambio y el que mejor lo representaba era Llamosas”, pero Macri sigue siendo muy bien valorado por la gran mayoría de los habitantes de esa localidad.
Infobae
