Hubo despliegue de personal municipal, médicos, enfermeros y de otras fuerzas de seguridad a lo largo de toda la noche y madrugada en diferentes puntos de la ciudad.
Pese al movimiento de público, particularmente jóvenes para participar de las diversas fiestas organizadas tanto en lugares cerrados como al aire libre, las autoridades consideraron que todo resultó más tranquilo y ordenado que lo se suponía en un primer momento.
No obstante lo cual, hay que decir que se detectaron 15 alcoholemias positivas, que se secuestraron 41 vehículos, se libraron casi 70 infracciones, y hubo peleas y «revoleo» de botellas por ejemplo en la zona del monumento a MIlstein sobre Rosario y Cuyo el lugar que aparece ahora como uno de los puntos preferidos para los jóvenes para los encuentros de música, baile y tragos.
De hecho, hubo que intervenir allí en un momento con todas las fuerzas, incluído el servicio de emergencias. Calculan que pasadas las 3 de la mañana se habían reunido en el sitio algo más de 3 mil personas.