La foto del ministro de Economía, Sergio Massa, y el embajador de Estados Unidos en Argentina, Marc Stanley, mientras firmaban un acuerdo intergubernamental para compartir información fiscal generó una ola de consultas en bancos, estudios contables, financieras y brokers sobre el alcance que tendrá. Si bien hay dudas sobre la letra chica, en el mercado hablan de un “efecto atemorizante” que derivó en un interés en saber cómo será el blanqueo.
Dentro del Gobierno, aseguran que recibirán información masiva sobre las cuentas de argentinos en Estados Unidos, tanto de personas físicas como jurídicas. Detallan que podrán ver saldos y utilidades de las cuentas. Sin embargo, en el mercado todavía dudan. En el sitio web de la embajada de los Estados Unidos en Argentina asegura: “Este acuerdo permitirá el intercambio recíproco de cierta información de cuentas financieras entre Estados Unidos y Argentina, garantizando la adecuada protección de los datos”.
Fuentes del sector bancario, que el lunes por la tarde participaron de una reunión por el tema con la Secretaría de Financias, contaron a este diario que se trató de un “encuentro informativo”, pero que todavía “faltan datos”. La mayor duda es cuál será el alcance de los datos, y desde cuántos años para atrás, dado que Massa había dicho que sería desde el 2021 en adelante, pero ahora la AFIP busca que arranque en 2018.
“Creemos que el Gobierno quiere asustar, y lo está logrando, porque hay preocupación por el alcance, muchas preguntas y hasta cuánto llegará hasta atrás”, contó uno de los participantes del encuentro. Por este motivo, agregó que muchos de los clientes preguntan sobre la letra chica del blanqueo. “El que tenga dudas seguro va a optar por blanquear”, agregó.
De todos modos, de momento no hay ningún proyecto de ley de exteriorización. Rigen tres opciones para blanquear dinero: para construir, comprar propiedades, o para importar insumos. Massa aseguró existirá un proyecto de ley de un blanqueo en tres etapas, para que esté vigente antes del 30 de septiembre del 2023, cuando estará disponible toda la información del acuerdo. Sin embargo, en el mercado agregan otras pregunta: “¿Llega el Congreso a tratarlo antes del 31 de diciembre? ¿Y cuando llegue al recinto, la oposición lo va a acompañar?”.
Fuentes del sector empresario vieron con asombro las imágenes de la Cámara de Diputados de la semana pasada. Además, si bien existe un proyecto de ley del senador Oscar Parrilli que incluye el apartado de un blanqueo y ya tiene media sanción del Senado, fuentes de Diputados asegura que no podría aprobarse en la Cámara Baja, debido a que no cuenta con acompañamiento de la oposición. Desde un importante estudio tributario agregaron: “La oposición no va a querer asegurarle recursos excepcionales al Estado en un año electoral”.
Según pudo averiguar Ámbito, de momento no está claro cómo será el proyecto de ley de blanqueo. En lo que si está trabajando AFIP por estas horas, junto con Economía, la Embajada de EE.UU. y el Tesoro, es en la reglamentación del acuerdo. Para eso, detallaron, tienen que realizar una modificación en la resolución 4056/2017. El artículo 4 de esa resolución establece que las instituciones financieras obligadas deberán suministrar información sobre el nombre y apellido de la persona o su razón social, ya sea de los titulares, o de la persona controlante de la entidad titular de la cuenta.
Además, esta misma resolución que tendrá algunos cambios, hace referencia a las participaciones en fideicomisos o trust. La gran duda del sector empresario es si figurará la palabra “beneficiarios finales”. En la actual resolución, se habla de “personas controlantes”, al asegurar que son los “beneficiarios efectivos”, que en el caso de una empresa, implica que una persona humana es la que termina ejerciendo el control de dicha entidad. La pregunta es si el titular es efectivamente el beneficiario final, o un apoderado.
Mientras tanto, en diciembre el Congreso tiene otra tarea relacionada a las finanzas. Al Poder Ejecutivo también le interesa que se avance con un nuevo proyecto de ley sobre lavado de activos. Es que el año que viene, vendrá a la Argentina una misión del Grupo de Acción Financiera Internacional. Además de tener que ajustar desde lo técnico, el GAFI también mide la efectividad, un punto flojo para el país.
Ambito